Mi primera vez… donando sangre.
marzo 10, 2011 5 comentarios
Ayer recibí en mi buzón una carta del Centro de Transfusión de la Comunidad de Madrid, en la que me enviaban los resultados de mi sangre (grupo sanguíneo; hemoglobina; leucocitos; plaquetas; enfermedades chungas tipo VIH, Hepatitis B, C y Sífilis) así como un carné de donante. La verdad es que nunca había donado anteriormente debido a mi terror a las agujas. De hecho, me tiré bastantes años sin hacerme revisiones anuales con tal de no hacerme una analítica. Pero en fin, al final me animé a donar un domingo por la tarde en el autobús que hay en la Puerta del Sol y, aunque me hicieron bastante daño, la verdad es que si te toca gente simpática dentro, pasas un buen rato. Luego me fui al cine con mi novio y allí me zampé la cajita que te dan de abituallamiento xD. Eso sí, aunque no se me puso morado el brazo, estuve sin poder doblarlo bien un par de días; pero bueno, un mal menor. ¡Una experiencia más y que quizás repita! 😉
exoendogenia.wordpress.com 
¡Enhorabuena por superar tu miedo! Yo estoy en ello, de verdad que tengo que ir…
Pues nada, el próximo día te vienes conmigo.
Shaula, ¡enhorabuena por dar el paso! 🙂
Muchas gracias «ninios» ^^ ánimo Laura!! 🙂
xD Yo también odio las agujas y que me saquen sangre…
Y, sin embargo, hace un par de meses también me decidí a donar. En parte, lo tenía decidido desde hace tiempo, porque ahora por fin cumplo todos los requisitos, pero me decidí a hacerlo ese día en concreto porque se me había olvidado coger dinero y/o llevarme un tupper con comida, y la mezcla de los sentimientos de hambre y de solidaridad me llevaron a pasar 10 minutos tumbada con una aguja clavada en el brazo.
Pero por lo que recordaré ese día es porque esa tarde, no sé por qué, me dio el punto y acabé improvisadamente en un dentista, cosa que ODIO totalmente, les tengo pánico; no lo he vuelto a pisar desde entonces, a pesar de que me recomendaron encarecidamente que lo hiciera, me queda muuucha boca por arreglar. Entre lo de la donación y lo del dentista, creo que aquel día me había levantado un poco masoquista xD
Aunque sigo odiando las agujas, espero ser capaz de volver a entrar en el bus de donaciones la próxima vez que lo vea. Para que vuelva al dentista tendré que tener humor masoquista de nuevo, eso es ya demasiada tortura xD
xDDDDD menudo día! pues nada, te tocará hacerte pupita para volver a donar, porque está claro que ese es el mecanismo en tu caso! xD ánimo, que luego no se pasa tan mal 🙂